¡Indignaos!... pero más a menudo.

(Imágenes: ¡Democracia real ya! ¿Toma la calle! y web sobre elecciones del ministerio del interior)

Hace tiempo que vengo detrás de hacer un miniarticulillo con algunas ideas sobre participación en manifestaciones, grandes concentraciones y sobre la participación en las elecciones de todo tipo, municipales, autonómicas, estatales y europeas, así que voy a aprovechar las manifestaciones del 15 de mayo y las futuras elecciones municipales y autonómicas. Además lo voy a enviar a mis conctactos a modo de spam, así me quito la espinita por partida doble.

Sobre las manifestaciones del 15 de mayo, olé por la gente que salió. No fuimos millones pero sí unos cuantos miles. Es un buen comienzo. Pero no nos quedemos en la alegría ni vivamos de las rentas de saber qué majos por habernos manifestado. Esto debe ser el principio. Y hay que comenzar a pensar alternativas de verdad. Está bien gritar y tocar los pitos (en todos los sentidos) para que sepan que estamos hartos y hartas, pero ahora toca ir pensando en cosas que hacer. Por ejemplo, si somos tantos los que salimos, unas buenas campañas de boicot hacia grandes compañías explotadoras no estarían mal. Hablo de campañas para reducir la dependencias a las petroleras, a empresas que inducen al consumismo, promocionar y usar el transporte público, ser más solidarios con los que tenemos cerca, etc. Si los miles de ciudadanos que salimos a la calle ejercemos nuestra presión como consumidores no consumiendo ciertos productos, creo que eso puede tener un buen impacto.

Además podemos echar mano de la iniciativa popular para que no sean los partidos los únicos que legislen. Que la participación no se limite a las elecciones. Hacen falta referéndums, consultas populares y que nos pongamos la pilas para enviar propuestas de leyes a los parlamentos autonómicos y al congreso. Vamos a ponernos las pilas en pedir cosas palpables y realmente necesarias. Bastan 500.000 firmas, que tampoco son tan complicadas de conseguir. Y además tenemos un buen capital humano que está más que preparado para redactar leyes alternativas, enviar propuestas. Miles de licenciados en derecho, políticas, medicina, biología muchos en desempleo, que podemos poner nuestro tiempo y conocimientos a  disposición de la ciudadanía para crear leyes alternativas que obliguen a los políticos, nuestros servidores, a legislar lo que necesitamos nosotros, no el mercado.

Hay que seguir saliendo a la calle, si hace falta una vez al mes, pero no nos conformemos con esto. No hay que derrocar a nadie sólo ejercer nuestro derecho de decidir y que tenemos tan dormido.

Y sobre las elecciones presentes y futuras. Si ya sabes a quién votar, fenomenal. ¡Adelante! Es muy importante estar bien informados sobre las opciones a votar, pero no con las verborreas que nos lanzan durante las precampañas y campañas sino con hechos. Una buena forma de estar bien informados es mirarse los resultados de las iniciativas parlamentarias de los distintos parlamentos (no solo por la prensa). En la web del Congreso se pueden ver las iniciativas presentadas por el gobierno de turno y los diferentes grupos parlamentarios, así como los apoyos que ha podido tener y si han recibido o no enmiendas. Observando las iniciativas se pueden evaluar las intenciones de cada partido. En mi opinión además, una proposición o un proyecto de ley que haya tenido muchos apoyos y/o enmiendas quiere decir que ese partido en concreto ha dialogado o necesitado dialogar con otras visiones políticas. Si estamos en un país plural, las leyes también deben reflejar esa pluralidad.

Pero quien esté indeciso o hasta las narices de los partidos tradicionales, debe votar igualmente ¡NADA DE QUEDARSE EN CASA! Si nos quedamos en casa ganarán los políticos, no los ciudadanos. Pero si vamos a votar y por ejemplo lo hacemos en blanco, el resultado en reparto de diputados y concejales será el mismo que quedarnos en la cama, pero en resultados sumatorios podemos demostrar que estamos hartos y hartas de tanto político que solo mira por seguir en el poder. Si consiguiéramos un total de 10% de votos en blanco sería un auténtico logro. ¿Difícil? Pues no tanto, si tenemos interés en que pase. Es importante que todos los ciudadanos hartos nos pongamos de acuerdo y votemos una sola opción que refleje este hartazgo y nos dé fuerza. Sin hacer campaña por nadie, hay un partido llamado Ciudadanos en Blanco que ofrece que el voto en blanco cuente en el reparto y deje escaños vacíos que demuestren que estamos ya hasta las... Es una opción.